Domingo...



Amanece y no hay dolor
existe un silencio profundo
típico de domingo.

Abro la ventana,
el ambiente huele a mar,
el olor a gato sobre mi cobertor,
y el aroma de café recién pasado,
activan mi sentido del olfato.

Serotonina al máximo,
no es posible despertar tan temprano,
soy una ardilla inquieta,
que necesita canalizar la energía de hoy.

Música a todo volumen,
no me interesa despertar a los vecinos,
me desplazo desnuda en mi reino.

Un poema para mi hambre,
papelitos de color en el que hurto un verso,
mi bitácora en blanco,
un lápiz huérfano.

Ruido agudo,
mensaje de buenos días,
la estrofa de una canción.

Blister de pastillas,
cada quien con nombre y horario,
y ese pequeño hincón,
mientras observo la imagen de Kahlo.

Sacudo la cabeza,
la ironia es atrevida,
nuestra espalda Frida, nuestra espalda!.

It's No Good!!!.

Pompones morados,
nieve blanca,
claveles que ayer me regalé.

La vida es bella, pienso.

Sorpresa!!!
mi ángel de la guarda con bigotes,
y un gesto, 
mi amor...


Charo Celebi

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